Incluyo el texto que leyó la interfecta y que, amablemente, ella misma se ha servido enviarme:
"Hoy me alegra haberme equivocado.
Me alegra saber con certeza que lo vuestro ha sido y es mucho más fuerte que todas las razones que yo encontré en un principio para que no funcionara. Que las distancias entre vosotros, las que yo creía insalvables, se han desintegrado al calor del amor de os profesáis. Que habéis barrido las cenizas de vuestras diferencias bajo la alfombra, donde no molesten, donde no interfieran con lo verdaderamente importante, con ese cariño prodigioso…
Me alegra que aquel “chico tan simpático de Madrid” del que Noelia me habló por 1ª vez hace ya casi más de siete años en Londres, fuera lo suficientemente obstinado y valiente, que estuviese lo suficientemente enamorado como para no aceptar un “no” por respuesta. Me alegra Manuel que, contra todo pronóstico, consiguieras a tu chica!
Me alegro, Nosi, de que te dejaras querer y de que ese amor te desarmara y enterneciera hasta tal punto que no pudiste más que corresponderlo. De que tu alma haya encontrado un muy digno recipiente donde volcar toda la belleza que contiene y que los intrincados caminos de tu mente sean ahora menos arduos, ahora que tienes quien te tome de la mano y te conduzca a casa cuando pierdas el norte…
Me alegro de haber sido participe de vuestra historia porque los dos me habéis dado una lección que no podré olvidar mientras viva: el amor, verdaderamente, lo puede todo…
Y me alegro de estar hoy aquí con vosotros como testigo de vuestra unión, como vuestra amiga y celebrar que, no sólo os habéis querido hasta ahora sino que, queréis perpetuar ese amor por el resto de vuestros días.
Me alegro mucho, pero mucho mucho, de verdad que sí…
1 Comments:
At 9:53 AM,
Noelia Almenara said…
Incluyo el texto que leyó la interfecta y que, amablemente, ella misma se ha servido enviarme:
"Hoy me alegra haberme equivocado.
Me alegra saber con certeza que lo vuestro ha sido y es mucho más fuerte que todas las razones que yo encontré en un principio para que no funcionara. Que las distancias entre vosotros, las que yo creía insalvables, se han desintegrado al calor del amor de os profesáis. Que habéis barrido las cenizas de vuestras diferencias bajo la alfombra, donde no molesten, donde no interfieran con lo verdaderamente importante, con ese cariño prodigioso…
Me alegra que aquel “chico tan simpático de Madrid” del que Noelia me habló por 1ª vez hace ya casi más de siete años en Londres, fuera lo suficientemente obstinado y valiente, que estuviese lo suficientemente enamorado como para no aceptar un “no” por respuesta. Me alegra Manuel que, contra todo pronóstico, consiguieras a tu chica!
Me alegro, Nosi, de que te dejaras querer y de que ese amor te desarmara y enterneciera hasta tal punto que no pudiste más que corresponderlo. De que tu alma haya encontrado un muy digno recipiente donde volcar toda la belleza que contiene y que los intrincados caminos de tu mente sean ahora menos arduos, ahora que tienes quien te tome de la mano y te conduzca a casa cuando pierdas el norte…
Me alegro de haber sido participe de vuestra historia porque los dos me habéis dado una lección que no podré olvidar mientras viva: el amor, verdaderamente, lo puede todo…
Y me alegro de estar hoy aquí con vosotros como testigo de vuestra unión, como vuestra amiga y celebrar que, no sólo os habéis querido hasta ahora sino que, queréis perpetuar ese amor por el resto de vuestros días.
Me alegro mucho, pero mucho mucho, de verdad que sí…
Enhorabuena!"
Post a Comment
<< Home